La creciente obsesión por la imagen estética y la higiene dental ha generado un fenómeno devastador en la salud oral de muchos pacientes. En un intento de conseguir una sonrisa más blanca, brillante y de apariencia más sana, muchos pacientes han abusado del blanqueamiento dental y han terminado por comprometer la salud de sus dientes. A este fenómeno se le conoce como blancorexia u obsesión por el blanqueamiento dental.
Esta obsesión por los dientes blancos va acompañada de una sensación de que la sonrisa nunca es lo suficientemente clara. Un pensamiento que provoca que los pacientes se expongan a los agentes blanqueadores del tratamiento dental demasiado a menudo y sufran los efectos secundarios de dicho abuso. La irritación o quemadura de las encías, la translucidez de los bordes de los dientes e incluso la coloración azulada de los mismos son los principales peligros de la repetición excesiva de estos tratamientos.
Se ha demostrado que la exposición a los agentes blanqueadores de manera abusiva en un periodo de 10 años, puede provocar efectos irreversibles en los dientes y las encías. Los blanqueadores dentales de venta en internet o los de fabricación casera son en parte culpables de esta situación.
El blanqueamiento dental no comporta riesgos para la salud dental ni gingival siempre y cuando se aplique por un profesional cualificado y en pacientes que tienen una buena salud oral y una higiene adecuada.
Consultanos y haremos una cromatografía del color de tu esmalte dental y podremos saber cuál es la verdadera tonalidad de tus dientes y qué efecto lograremos con nuestros tratamientos de aclaramiento y blanqueamiento dental.